Open Source y Free Software son dos términos que por su aparente similitud generan cierta confusión. Así que hoy dedicaremos unos minutos a explicar la diferencia entre ambos términos. Pero comencemos por el principio y definamos ambos conceptos antes de ponernos a compararlos.

Open Source

Código abierto, mucho más conocido por su denominación anglosajona Open Source, hace referencia a todo aquel software distribuido y desarrollado libremente. Se centra en los beneficios prácticos del desarrollo colectivo de software. La posibilidad de contar con una fuente inagotable de mentes trabajando, aplicando soluciones diferentes y uniendo esfuerzos en pos del bien colectivo. Este movimiento defiende que a través del uso de código accesible y compartido el programa resultante contará con una mejor calidad y adaptación que los sistemas basados en un código propietario.

Free Software

A la hora de hablar de software libre o Free Software como es denominado en los países anglófonos, hay que tener en cuenta que la palabra «free» no hace referencia a la gratuidad del producto resultante, sino a la libertad que entraña el proceso de producción y especialmente la distribución de este tipo de software.

Esta libertad se articula en torno a 4 pilares fundamentales:

– La libertad de usar el programa, con cualquier propósito.

– La libertad de estudiar cómo funciona el programa y modificarlo, adaptándolo a tus necesidades.

– La libertad de distribuir copias del programa, con lo cual puedes ayudar a tu prójimo.

– La libertad de mejorar el programa y hacer públicas esas mejoras a los demás, de modo que toda la comunidad se beneficie.

Entonces… ¿En qué se diferencia Open Source de Free Software?

Como hemos visto, ambos conceptos hacen referencia a un cierto grado de libertad asociado el software, siendo la mayor diferencia el plano de aplicación de esa libertad. En el caso del Open Source la libertad se centra en la esfera de desarrollo, en la que los desarrolladores comparten acceso al código original y opcionalmente a las modificaciones realizadas en este por otros partners de desarrollo, generando así sinergias entre programadores y la mejora colectiva del código. Por su parte el Free Software centra su esfera de libertad en el plano de los usuarios, los cuales son libres de utilizar y redistribuir el código a su antojo, modificarlo y adaptarlo a sus necesidades.

Otra de las diferencias más evidentes es la que radica en el coste del software para el usuario final. Pues si bien bajo la bandera del Free Software puede recibirse una remuneración por el trabajo realizado siempre y cuando se entregue al cliente el código fuente del mismo, los desarrolladores que se engloban bajo el Open Source distribuyen directamente todo código generado sin ningún tipo de remuneración.

Así pues Software Libre es aquel que respeta la libertad de todos los usuarios que adquirieron el software para ser usado, copiado, estudiado, modificado, y/o redistribuido libremente de varias formas. Es muy importante aclarar que el Software Libre establece muchas libertades pero no es necesariamente gratuito. Con esto quiero decir que conservando su carácter libre (respetando las libertades), puede ser distribuido de manera comercial, garantizando siempre sus derechos de modificación y redistribución.