La factura electrónica ha supuesto toda una revolución en la forma en la que los asesores contables gestionan la relación con sus clientes. Esta innovación no solo ha transformado la forma en la que se gestionan las transacciones, sino que también ha redefinido el rol del asesor.
En este artículo, te explicamos cuáles han sido los cambios que ha traído la facturación electrónica a las asesorías contables. Además, por si aún no has tomado la decisión de adoptarla, también podrás conocer todos sus beneficios. ¡Sigue leyendo para descubrir el futuro de tu asesoría!
ÍNDICE
Cambios que trae la factura electrónica
La factura electrónica supone un gran cambio en la forma en la que los asesores contables se relacionan con sus clientes. A continuación, te explicamos cada uno de ellos:
Mayor eficiencia y precisión
Incorporar la facturación electrónica en el día a día de cualquier asesoría aumenta la eficiencia y precisión de la gestión fiscal. Gracias a la digitalización y a la automatización de procesos, los asesores contables reducen la cantidad de errores manuales que pueden cometer.
Por tanto, no solo realizan más tareas en el mismo tiempo, sino que el ahorro de tiempo les permite dedicar más atención a aquellas tareas de mayor importancia y que pueden aportar un gran valor al servicio de la empresa.
Mejora de la comunicación
En un entorno tan digitalizado como el actual, que una factura sea electrónica significa que se va a poder acceder a ella en tiempo real en cualquier momento y lugar.
Como resultado, la información se vuelve mucho más transparente y permite tomar decisiones de forma mucho más informada. Esto, junto con el aumento de la fluidez en el intercambio de la información, resulta en una mejora de la comunicación y colaboración entre equipos.
Cumplimiento normativo más sencillo
Aunque muchos asesores piensen lo contrario, lo cierto es que, pasado el bache inicial que supone la adopción de la factura electrónica, la presentación de declaraciones tributarias -como el IVA- se vuelve mucho más sencilla.
Además, permite adaptarse con mayor rapidez a los cambios legislativos y reduce las sanciones por errores o retrasos.
Ahorro de costes
Aunque pueda resultar evidente, es importante resaltar la reducción de costes que supone la factura electrónica. Y es que no solo se elimina por completo la elaboración y tratamiento en papel, sino que también se reduce la necesidad de tener esa documentación almacenada en algún lugar.
Si son pocas facturas, lo más seguro es que se puedan organizar y almacenar en algún lugar del despacho, pero conforme se van acumulando, el desborde de papeles puede obligar a alquilar un lugar específico. Tener todas esas facturas en la nube reduce ese gasto a cero.
Aumento de la seguridad
Todas las facturas contienen muchos datos sensibles de los clientes, por lo que es fundamental proteger este tipo de documentación. Gracias a la factura electrónica se pueden asegurar altos niveles de seguridad, como por ejemplo la protección frente a fraudes y el cumplimiento de las normativas de protección de datos.
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Beneficios de implantar la factura electrónica
La implantación de la factura electrónica tiene beneficios tanto para los clientes como los asesores contables. Estos se podrían resumir en los siguientes puntos:
- Procesos más ágiles. Tras implantar la factura electrónica, los procesos de las asesorías se vuelven más ágiles gracias a la automatización, a la integración con sistemas contables y al acceso en tiempo real a la información.
- Reducción de errores. Al eliminar la entrada manual de datos, se reducen significativamente la cantidad de errores cometidos. Aunque no solo eso, y es que la tecnología también es capaz de validar automáticamente los datos y de evitar las duplicidades.
- Mayor seguridad y control. Incorporar firmas digitales en las facturas electrónicas garantiza que estas no hayan sido alteradas, lo que proporciona seguridad y tranquilidad frente a posibles fraudes.
- Mejora de la relación con los clientes. Tal y como hemos explicado a lo largo del artículo, la facturación electrónica ayuda a aumentar la productividad. Como resultado, los clientes reciben un asesoramiento mucho más proactivo, lo que mejora su experiencia con la asesoría.
- Servicio más personalizado. En relación con lo anterior, poder dedicarles más tiempo a los clientes de la asesoría permite entender de forma mucho más clara y completa cada situación. Así, se les puede ofrecer una solución que de verdad se ajuste a sus necesidades y, por tanto, que de verdad resuelva su problemática.
- Optimización de la gestión. La factura electrónica se integra de forma total con los sistemas de gestión empresarial, por lo que facilita el resto de los procesos de la empresa. Por ejemplo, la gestión del flujo de caja y el control financiero.
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